Mi momento y rincón preferido del día
La verdad es que tengo varios rincones y momentos en que soy consciente del privilegio de vivir en un piso que no cambio por ninguno, pues es el mío desde hace cuarenta años y vecino de otro en el que viví antes otros quince por lo menos; o sea, casi toda la vida. Por supuesto, reformadas las partes que lo necesitaron. Podría hablar del dormitorio y la cama, verdadera balsa de flotación en los oleajes