SEMANA (III)
DOMINGO No se qué extrañas relaciones mentales producen los excesos navideños. Ayer, tomando un par de tazas con un amigo abstemio reconvertido, en el bar Otra Ronda, me acordé del Zumolandia de Santiago, local de mis tiempos de estudiante desestructurado. El Zumolandia, como su propio nombre indica era el local más cursi y ñoño de Compostela, apropiado antro para coyundas a favor de natura entre niñas de Tercero de Derecho con ansias uterinas judiciales y