No sabemos lo que dirá todo el rollo, pues nos cuentan solo sobre una crítica de la habilidad musical de una joven esclava, pero lo que diga, por el simple hecho de que lo diga Platón y, además, en las últimas horas de su vida, es como para celebrar, pues no solo de política actual se alimentan las neuronas sino de la antigua y clásica de la que venimos y a la que volvemos siempre y cuando queremos explicarnos cosas que ocurren actualmente. Nos informa hoy El Mundo sobre la portada del Times londinense que titula “La última tarde de Platón en rollos de papiro petrificados por el Vesubio”; en el subtítulo se resume la historia: “Se descifra con tecnología de imágenes un manuscrito escrito por el filósofo griego en las últimas horas de su vida, en el que critica la habilidad musical de una joven esclava”. Al parecer, según el mismo medio, el rollo de papiro estuvo enterrado bajo metros de ceniza volcánica desde una erupción de hace casi 2000 años y, aunque se encontró en los restos de una villa de Herculano en 1789, hasta ahora no se había logrado descifrar. Descifrado, pues, ahora hace falta que nos informen del resto, porque algo de lo que creía esperar Platón más allá de la simple representación, me imagino, que diría en estas últimas horas. Es tan fácil de suponer como el cristiano que sale de esta vida con la extremaunción. Benditos clásicos, ¿verdad, Daniel?, que nos ayudan a comprender este mundo y lo que hay en él, que son como almax para el estómago que procesa todo lo que comemos en nuestra vida actual.