Baltasar en el ojo del huracán, del Concello. El rey negro resultó tener antecedentes penales y, por ello, con él llegó el escándalo. La culpa, para todos los enemigos del alcalde la tiene él, alcalde, porque la empresa que lo contrató no hizo bien sus deberes, al parecer, pero seguro que a muchos nos podría ocurrir lo mismo en el sentido de contratar a alguien profesional que comete un error de principiante, y que de alguna manera lo tiene que pagar; pero de esto a querer hacer al alcalde responsable de algún delito es igual que detectar en la denuncia un interés desproporcionado por trincar en el fallo lo que en otro orden no pueden. Eso parece. Recordemos algún caso de persona famosa y querida en Ourense que fue condenado por delito de abusos, y al que, sin embargo, ningún político local pidió que devolviera su medalla de oro auriense.