El Chollo que no es chollo, o sea el trabajo que no es tan feliz como a veces aparenta o el mismo nos hace creer. Será el síndrome postvacacional, será que uno se hace mayor, será que las condiciones para disfrutar cada día están más frustradas por la general mala economía, no sé exactamente por qué será pero ser es. Bueno, claro que el hecho de ser España el país con mayor paro de Europa, que asciende al 12,6 mientras la media está en el 6, o el nuevo socio que nos asignado en cualquier negocio con nombre de Luz, y otros muchos datos de telediario que vemos continuamente, no ayuda a ver el Chollo como un chollo sino casi como castigo divino únicamente. Pero no queda más remedio que seguir, amigos.
Vuelta al chollo
Comparte esta noticia:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email
Imprimir