Terrorífico
Ayer fue un día para alejarse más, si cabe, de esta clase política que nos lleva de cráneo desde hace tiempo. Por supuesto, en este caso hay que atribuir la mayor de las vergüenzas ajenas del poder la manifiesta conducta dictatorial y nada democrática de unos políticos que determinan lo que les parece en gana sin respeto a las leyes establecidas ni a la reglas o normas democráticas. La verdad es que el sonrojo debería al menos cortarlos un poco en ese gesto ya común de los comunes que lo han puesto de moda que resulta de aplaudirse a sí mismos por lo bien que creen estar obrando. en fin, ni humildad ni dar cuentas de los delitos económicos que se están tapando de manera manifiesta en el olvido y con el nuevo problema. Pues bien, ya está el paso dado de el Parlamento de Cataluña aprobando este miércoles la ley con la que los independentistas quieren dar legitimidad al anunciado referéndum del 1 de octubre. PP, Ciudadanos y PSC abandonaron el hemiciclo y no participaron en la votación y los podemitas, con la señora Ángeles Puedohacerloquequiero retirando las banderas españolas que habían dejado en sus escaños los parlamentarios populares, se abstuvieron como pilatos españoles catalanes – catalanes no españoles- no españoles ni catalanes- no se sabe ni de donde son y van. Junts pel Sí y la CUP modificaron el orden del día del pleno para incluir la aprobación de la ley por vía de urgencia, lo que provocó la condena unánime de la oposición y una escalada de tensión en el Parlament. Pero la imagen maravillosa del día es la Inés Arrimadas, rezando como un santa con su carita lavada y ciertamente hermosa a la Invirgen Carmen Forcadell, la presidenta que se pasa por el forro de sus bajos toda legalidad.
De terror
Mohamed Hafid ha pasado de militante apasionado y seguidor fervoroso del líder popular Imbroda a extremista radical yihadista en tan solo tres años. Ha sido detenido en Marruecos donde estaba planeando un acto terrorista. Increíble la capacidad de radicalización de esta gente que pasa de defender los principios de un partido político demócrata (aunque solo sea en teoría) a militar en una causa radical que mata por Alá. Y así, ‘ halá_vamos_ te señor’; ¡hay que fastidiarse!