La historia más extendida sobre la conmemoración del 8 de marzo hace referencia a los hechos que sucedieron en esa fecha del año 1908, cuando murieron calcinadas 146 mujeres trabajadoras de la fábrica textil Cotton de Nueva York en un incendio provocado por las bombas incendiarías que les lanzaron ante la negativa de abandonar el encierro en el que protestaban por los bajos salarios y las infames condiciones de trabajo que padecían.También se reconoce como antecedente a las manifestaciones protagonizadas por obreras textiles el 8 de marzo de 1857, también en Nueva York.

Dejad que la mujer se manifieste como es, para conocerla y para juzgarla; respetad su derecho como ser humano; (…) y si el derecho constituyente, como norma jurídica de los pueblos civilizados, cada día se aproxima más al concepto de libertad, no nos invoquéis el trasnochado principio aristotélico de la desigualdad de los seres desiguales (…). Dejad, además, a la mujer que actúe en Derecho, que será la única forma que se eduque en él, fueren cuales fueren los tropiezos y vacilaciones que en principio tuviere.(…) Yo me he regocijado pensando en que esta Constitución será, por su época y por su espíritu, la mejor, hasta ahora, de las que existen en el mundo civilizado, la más libre, la más avanzada, y he pensado también en ella como en aquel decreto del Gobierno provisional que a los quince días de venir la República hizo más justicia a la mujer que la hicieron veinte siglos de Monarquía. Pienso que es el primer país latino en que el derecho [de sufragio] a la mujer va a ser reconocido, en que puede levantarse en una Cámara latina la voz de una mujer, una voz modesta como ella, pero que nos quiere traer las auras de la verdad, y me enorgullezco con la idea de que sea mi España la que alce esa bandera de liberación de la mujer (…). Y yo digo, señores legisladores: (…) no dejéis que sea otra nación latina la que pueda poner a la cabeza de su Constitución, en días próximos, la liberación de la mujer, vuestra compañera.

Discurso de Clara Campoamor en las Cortes Septiembre de 1931.

Con un poquito de historia podemos liberarnos mejor de cierto postureo oficial, por ejemplo el que observamos en algún aspecto programado por por el Concello de OUrense para celebrar este día.

No me explico y me indigna como propietario de un espacio privado que ha rechazado ayudas institucionales ofrecidas por el poder político, y no por puro capricho sino por convencimiento de que no es la manera de crear talento y riqueza en el mejor de los casos y en el de cualquiera de los casos cierta autenticidad y leal competencia, y que entiende que la mejor ayuda a la empresa privada no es ninguna fórmula clientelar sino legislar para su viabilidad vía menos impuestos, menos normas reguladoras, menos exigencias extremas, menos apaleo administrativo; me indigna, pues, que el Concello lleva a espacios ‘privados’ que son mi competencia actos que bien pudieran hacer en sus espacios públicos, cual es la ínclita Molinera que se dedica diariamente a realizar actividades que conllevan la peor y más desleal competencia a la iniciativa privada (por cierto, si escucharan al juez Calatayud hablar de lo pernicioso que resulta el manejo de las nuevas tecnologías y redes de comunicación o redes sociales en el niño, reflexionarían sobre algunas de las iniciativas que realizan en La Molinera enfocadas para el mejor manejo de éstas; porque, claro, sospechamos que seducir a muchachitos ourensanos con la complicidad de los colegios y la propaganda en los medios de comunicación hacia esa actividad no resulta costoso y si que computa cuantitativamente para esos informes anuales con los que se pavonean de hacer bien las cosas.

Pero si a lo anterior añadimos cuáles son los espacios privados donde han organizado estos actos, convendremos que son buenos ‘amigos’ de ese Concello porque el que no está subvencionado (léase Liceo o Cine Club), la amistad viene dada por la relación del dueño del Café Plaza con la mujer del jefe máximo del partido al que pertenece el propio alcalde, relación de sociedad en otra Cafetería La Central que es, por otro lado, paradigma de caciqueo y negocio subterráneo a pesar de ser concesión pública.

Pues aún hay más: en este día tan señalado para reivindicar a la mujer el marido de la socia del local donde se celebra un acto organizado por el concello es hoy un hombre imputado por presunto delito contra la mujer, una mujer en particular, que lo ha denunciado por presuntamente mezclar poder con sexo y trabajo. Me lo expliquen.

Y ya por último que el formato del acto acto en el café sea tan parecido al que hicimos en elcercano hace un mes y que volveremos a repetir el día 16, en este caso sin igualdad pues son cuatro mujeres en lugar de dos hombres y dos mujeres que sería lo igual, es algo que cheira; eso sí acabarán todos cantando con otro amigo personal del alcalde cual es Daniel Minimalia. Que lo pasen bien. Amiguismo y poder siguen en el macho político por lo que la teoría ‘Contra las elecciones’ se está volviendo muy necesaria para salvar la democracia. De esto hablaremos otro día.