Da gusto escuchar leer en portugués a estas chicas alumnas de Franciscanas con Xian Bobillo a frei Luis de Sousa. Comenzaron este encuentro de los martes a las seis de la tarde leyendo a un autor que ha publicado en elcercano, Carlos García-Manzano para al acabar reunirse con él y cambiar impresiones sobre el libro en cuestión y la forma de narrar de Carlos. Ahora se han pasado al portugués con fonética gallega que suena bien también. Es un deseo por parte nuestra como anfitriones de este grupo que se sumen al mismo otros chicos/as de cualquier centro para enriquecer estos encuentros y algún mayor que lo desee, porque es vida, es cultura, es cambiar el chip de la movida más oscura para el pensamiento que jamás haya conocido este servidor. De momento, disfrutamos con estas sonrisas abiertas y las letras escogidas.

Da algo menos de gusto ver llegar a Roberto Verino, o Manuel Mariño, que para el caso es el mismo, a su nueva tienda de Ourense con la idea ‘innovadora’ de convertirla en nuevo espacio cultural. Hasta ahora alberga en sus paredes pintura pero ya anuncia que lo quiere convertir en espacio de encuentro cultural. Bienvenido al club, señor Verino pero querer emular en su tienda a O Volter parece no entender aquella reunión de tasca  que nada tiene que ver con la tasca glamourosa de la moda. Me parece a mi.

Gusto/disgusto en el caso Baltar (el del polvo en el Francisco II) porque el fiscal dictamina que los hechos puestos de manifiesto en dos declaraciones de la mujer señalando que había mantenido relaciones sexuales con Baltar a cambio de un puesto de trabajo en la Diputación considera que “no tiene indicio racional mínimo” que permita enervar el principio de presunción de inocencia por el hecho delictivo, que por otra parte podría atribuirse en análodas consideraciones a la propia denunciante que se creó “una expectativa de obtener, sin más consideración, un puesto fijo en la Diputación de Ourense que finalmente no se cumplió. “Da menos gusto todavía hablar de lo que publica hoy  el Faro de Vigo respecto al Comité de Ética de la Diputación que ha dimitido y que considera que Baltar debe dar explicaciones políticas en el pleno. Antes de dimitir se sumó al informe del politólogo de Transparencia Internacional que censura explícitamente la falta de respuesta pública. No sabemos si Feijoo y Rueda, Rajoy y la madre del cordero pepero pensarán de igual manera pero estaremos pendientes del asunto que la sociedad no olvidará hasta que se cierre con explicaciones/medidas oportunas y justas.