El Confidencial.- El asunto quedó rematado en la jornada del miércoles. Al menos todo lo fundamental. El traspaso de Iker Casillas al Oporto se puede dar por hecho, después de que las complicadas negociaciones iniciadas la semana pasada fructificaran de manera satisfactoria para todas las partes implicadas. Falta la confirmación oficial por parte de los clubes. El guardameta de Móstoles abandona su casa cansado y harto de lo vivido en los últimos años, desde que su guerra con Mourinho agitara la grada del Santiago Bernabéu y una parte de la afición se pusiera en contra del hasta entonces indiscutible ídolo del Real Madrid. Ahora, con Casillas en la rampa de salida, Florentino Pérez acelera para tener a De Gea en Madrid cuanto antes. Esta misma semana si es posible.
El Real Madrid y su agente de cabecera diseñaron la operación, cuando lainquietud del guardameta se hacía cada mayor, viendo que el comienzo de la pretemporada se acercaba y no surgía ninguna oferta que le contentara plenamente. Jorge Mendes y José Ángel Sánchez (Director General), por parte del club madridista, fueron las dos personas que gestaron la operación. El primero, también con línea directa en el Oporto, informó a Florentino sobre esta posibilidad, dado que Julen Lopetegui -colocado en el club portugués por un ‘satélite’ de Mendes- buscaba un guardameta para esta temporada. El rojiblanco Miguel Ángel Moyá parecía ser el elegido hace días, pero al no cerrarse la operación surgió el nombre de Casillas.
Desde el mismo momento en el que el Real Madrid comprobó que la operación de Casillas con el Oporto entraba en su recta final y que ningún contratiempo aparecía en el horizonte, Florentino Pérez pisó el acelerador para cerrar el fichaje de De Gea. Con todo pactado y negociado con el guardameta del Manchester United desde hace tiempo, quedan asuntos por rematar en un negocio que ha dirigido personalmente Jorge Mendes, agente del portero y con mando en las oficinas del Santiago Bernabéu.
Despedida ‘estilo Xavi’
Real y Madrid y Oporto confían en anunciar de manera oficial la operación a lo largo de este jueves. Al menos, cerrar por completo el negocio. El club blanco trabaja en el acto de despedida a Iker Casillas, que salvo sorpresa tendrá lugar el viernes. Aunque las relaciones entre el portero y Florentino Pérez nunca fueron las mejores, obviamente la exitosa trayectoria del guardameta merece lo mismo que vivió Xavi cuando se despidió del Barcelona. La institución quiere estar a la altura de las circunstancias y tributar al legendario portero la despedida que se ha ganado.
El nombre de De Gea lleva tiempo sonando en el Santiago Bernabéu desde hace mucho tiempo. Este periódico ya informaba a finales de 2014 que el ex del Atlético de Madrid continuaba estando en la lista blanca de futuribles, aunque a Florentino Pérez nunca le acabó de convencer plenamente. El pésimo desenlace de la pasada temporada, con un triplete en las vitrinas del Camp Nou y un incendio en el Santiago Bernabéu con despido incluido de Ancelotti, acabó por convencer a Florentino de la imperiosa necesidad de fichar un guardameta como De Gea.
De Gea ya ha comunicado al Manchester United su firme decisión de abandonar el club. Van Gaal, un rival peligroso a la hora de negociar en situaciones tan complejas como esta, tiene claro desde hace tiempo que debe buscar un recambio, pero hasta el último momento tratará de sacar el máximo partido en forma de euros. El Real Madrid, por su parte, tiene claro que ya no hay lugar para iniciar un camino de retorno y espera hacer oficial el fichaje de David esta semana. Rafa Benítez quiere contar con él para la gira por Australia y China que iniciará su equipo la próxima semana.