Nos lo cuenta Raquel Iglesias en La Voz de Galicia de hoy, que el local que hasta hace poco ocupaba en el Paseo Bazar Ourense va a ser tienda de una sociedad con sede en O Porriño que se dedica al comercio textil. ¿De dónde será esta sociedad? ¡Coño, claro, de donde es el mundo mundial: CHINA!.
Se trata de Cocoyouyi, ¡ya el nombre se las trae!, y en el cartel de local que anuncia la próxima apertura piden currículos para trabajar como dependientas. Así se va cumpliendo el vaticinio de que el mundo trabajará para China en su despertar.
Le tocó el turno ahora al Bazar Orense, mueblería con más de ochenta años de antigüedad, que echó el cierre al no llegar a un acuerdo con el propietario del local, que es amante, sin duda, de vivir de rentas y poco de ourensanismo, al igual que le ocurrió a tantos y tantos negocios que han sucumbido a la extinción de contratos anteriores a la Ley de Arrendamientos Urbanos de 1964. La firma china ya ha pedido la autorización para obras menores de reforma del local.
Pero no hay uno sin otro, dos sin tres, y con este histórico muere ahora también Almacenes Alfredo Romero en una esquina donde los chinos tienen otra buena oportunidad para hacerse con el comercio ourensano.