Es uno de los tipos más influyentes de España de los últimos veinticinco años. Su herramienta más poderosa fue El País del que fue director, pero desde hace años es presidente ejecutivo del Grupo Prisa que palmó la friolera de 2.000 millones de euros en 2014, teniendo que acometer una ampliación de capital para colocar un 10% de la compañía a un sultán de Qatar. Pese a esta cifra de quiebra para cualquier empresa menos para Prisa, el Grupo ha provisionado el bonus que cobrará Juan Luis Cebrián como complemento de jubilación a partir del 31 de diciembre de 2018, fecha en la que está previsto que ceda el testigo del imperio mediático, y que asciende a seis millones de euros.
Cebrián tiene también derecho a otro bonus de 250.000 euros en concepto de incentivo plurianual variable, que se le abonará en acciones de Prisa en enero de 2016 y que está sujeto, eso sí, a determinadas condiciones. Ambos complementos se conocen después de la última maniobra puesta en marcha por el propio Cebrián para seguir cumpliendo con el plan de refinanciación de la compañía, que cerró 2014 con unas pérdidas de 2.237 millones de euros (un 66% más que en 2013).
Mientras La Ser acometía despidos laborales el caradura de Cebrián se adjudicaba sueldo millonario, además de estas prebendas como la de este bonus e incentivo plurianual, y es que cuando abres la puerta a la deshonestidad todo es empezar y tirar la llave para no volver atrás.