El ahora académico, antaño periodista audaz y siempre escritor brillante ha culpado a los “ministros analfabetos” de quitar “El Quijote” de las escuelas y dijo que ya no se lee porque ellos no lo entendían y prefirieron eliminarlo, antes que educarse a sí mismos.
Y es que el libro de Miguel de Cervantes no es siquiera una lectura recomendada en los planes de estudio hoy en España, algo que viene de “generaciones de ministros analfabetos, uno tras otro, que ignoran qué es ‘el Quijote’, ni saben para qué sirve”, sino que “les suena a un texto complicado, aburrido, cervantino y esas cosas”