La peineta de Frank Gehry
(Jesús Ruiz Mantilla en EL PAÍS y fotografía de EFE) A juzgar por el tono en que venía, si se toman como referencia las declaraciones que le hizo a EL PAÍS el miércoles en París, Frank Gehry no parecía aterrizar en Oviedo con ganas de guerra. Pero fue llegar al hotel Reconquista, y no se sabe muy bien si por efecto de las fabes o qué, el caso es que el viejo roquero arquitecto, de